Por: Jeff Paliga / Panduit
Los MTDC son una parte crítica de las arquitecturas altamente distribuidas de hoy en día, y la capacidad de controlar de manera efectiva los altos costos de operarlos es fundamental para los proveedores. He aquí por qué: Los sistemas de enfriamiento del centro de datos representan casi el 37% del consumo total de energía, y es el gasto de operación del centro de datos de más rápido crecimiento. Y con los proveedores abordando cargas de trabajo cada vez más grandes, nunca ha sido más importante adoptar un enfoque más inteligente para el enfriamiento del centro de datos.
Métricas que importan
Dos de las métricas más importantes en el funcionamiento de un centro de datos de eficiencia energética son la efectividad del uso de energía (PUE) y el índice de enfriamiento en rack (RCI ®). PUE se calcula dividiendo la potencia total que ingresa a un centro de datos por la potencia utilizada para ejecutar el hardware informático dentro de él, lo que excluye la infraestructura de enfriamiento. PUE se expresa como una relación, con un PUE de 1.0 que representa una eficiencia energética perfecta. Sin embargo, debido al hecho de que el enfriamiento siempre consumirá energía adicional, es imposible lograr un PUE perfecto. Dicho esto, una infraestructura de enfriamiento optimizada que haga uso de innovaciones como sistemas de enfriamiento líquido o por inmersión podría lograr un PUE de 1.1 o mejor.
RCI es una medida de la eficacia con la que se enfrían los bastidores de equipos de acuerdo con los estándares y pautas térmicas de la industria. Específicamente, mide la diferencia de temperatura entre el aire introducido en el sistema para enfriarlo y el aire extraído después. La temperatura de entrada recomendada es de 64 ° – 80 ° F.
Estrategias de optimización de enfriamiento para el éxito
Además de controlar los costos, la optimización efectiva del enfriamiento ayuda a extender la vida útil del equipo, mejorar la confiabilidad y reducir el riesgo de tiempo de inactividad no programado. Sin embargo, la optimización de la refrigeración debe abordarse como un proceso iterativo debido al hecho de que los centros de datos se ejecutan durante todo el día, y cada hora ve diferentes tamaños de carga de trabajo. Adaptarse a este entorno en constante cambio es el objetivo principal de la optimización de la refrigeración, de ahí la necesidad de soluciones nuevas e innovadoras que puedan monitorear y controlar los sistemas de refrigeración sobre la marcha.
Cómo el monitoreo inalámbrico ayuda a mantener la eficiencia
Los puntos calientes son variaciones locales de temperatura que ocurren en un centro de datos. Son perjudiciales para el rendimiento y pueden requerir importantes recursos de energía y refrigeración para corregirlos. Sin embargo, los sensores de temperatura de rack del servidor colocados de manera óptima pueden automatizar el monitoreo y enviar notificaciones automáticamente si se superan los umbrales preconfigurados. Los sistemas más sofisticados también controlan las velocidades de los ventiladores automáticamente para lograr un equilibrio óptimo entre la temperatura del rack y el uso de energía. Además, con todos los sensores conectados de forma inalámbrica a una base de datos centralizada, los administradores pueden experimentar visibilidad en tiempo real de sus entornos de centros de datos a nivel holístico y granular.